Resonancia Magnética de Cráneo

Cabeza
Resonancia magnética de la cabeza o IRM de la cabeza es un examen imagenológico que utiliza imanes y ondas de radio potentes para crear imágenes del cerebro y de los tejidos nerviosos circundantes.

Forma en que se realiza la resonancia magnética de la cabeza
Le pueden solicitar que use una bata de hospital o prendas de vestir sin broches metálicos. Ciertos tipos de metal pueden causar imágenes borrosas.

Se acostará sobre una mesa angosta, la cual se desliza dentro de un tubo grande similar a un túnel.

Algunos exámenes requieren de un tinte especial (medio de contraste). El tinte por lo regular se administra antes del examen a través de una vena (IV) en la mano o el antebrazo. Este medio de contraste ayuda al radiólogo a observar ciertas áreas más claramente.

Se pueden colocar pequeños dispositivos, llamados espirales, en la cabeza, el brazo o la pierna u otras áreas que se vayan a estudiar. Estos dispositivos ayudan a enviar y recibir las ondas de radio y mejoran la calidad de las imágenes.

Durante la resonancia magnética, la persona que opera la máquina lo vigilará a uno desde otro cuarto. El examen casi siempre dura de 30 a 60 minutos, pero puede demorar más tiempo.

Preparación

A usted se le puede solicitar no comer ni beber nada durante un período de 4 a 6 horas antes del examen.

Si usted le teme a espacios cerrados (sufre de claustrofobia), coméntele al médico. Le pueden dar un medicamento para ayudarlo a que le dé sueño y que esté menos ansioso, o el médico puede recomendar una resonancia magnética “abierta”, en la cual la máquina no está tan cerca del cuerpo.

Antes del examen, coméntele al médico si usted tiene:

  • Clips para aneurisma cerebral
  • Ciertos tipos de válvulas cardíacas artificiales
  • Desfibrilador o marcapasos cardíaco
  • Implantes en el oído interno (cocleares)
  • Nefropatía o diálisis (posiblemente no pueda recibir el medio de contraste)
  • Articulaciones artificiales recientemente puestas
  • Ciertos tipos viejos de stents vasculares
  • Ha trabajado con láminas de metal en el pasado (puede necesitar exámenes para verificar si hay pedazos de metal en sus ojos)